“Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la Ley, hasta que todo sea cumplido.” (Mateo 5:18 RVG)
Toda la Ley de Dios es inviolable. Otra forma de decir lo que dijo Jesús: “Hasta que pase la ley de la gravedad, ni la letra más pequeña de la Ley pasará, hasta que todo se cumpla.”
¿Ya pasaron los Cielos y la tierra? Entonces la Ley de Dios no ha cambiado, ni una jota ni una tilde. Pero los hombres, para acomodarse a sus caprichos, han cambiado el mandamiento de “Acuérdate de guardar el séptimo día para santificarlo,” a “Santifica el primer día y trata al séptimo igual que cualquier otro.”
Sin embargo, escuche lo que Dios dice:
Éxodo 20:8-11 LBLA
(8) Acuérdate del día de reposo para santificarlo.
(9) Seis días trabajarás y harás toda tu obra,
(10) mas el séptimo día es Día de Reposo para el SEÑOR tu Dios; no harás en él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu sierva, ni tu ganado, ni el extranjero que está contigo.
(11) Porque en seis días hizo el SEÑOR los cielos y la tierra, el mar y todo lo que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto, el SEÑOR bendijo el día de reposo y lo santificó.
¿Quién es el que tiene las agallas para oponerse a Dios y cambiar Su Ley, contrario a Él en las Escrituras? Como está escrito acerca del inicuo: “Y él proferirá palabras contra el Altísimo y afligirá a los santos del Altísimo, e intentará cambiar los tiempos y la Ley; y le serán entregados en sus manos por un tiempo, por tiempos y por medio tiempo…” (Daniel 7:25).
La Iglesia Católica se jacta de su poder y autoridad para cambiar la Ley de Dios. Muchos de los que se han apartado de la tiranía de Roma dicen predicar la Biblia y nada más que la Biblia. Pero entre otras de las trampas románicas como el bautismo de niños, la doctrina del tormento eterno, la herejía de la Trinidad y la observancia de la Misa, ellos continúan en la conducta blasfema de guardar el domingo en vez del sábado.
¿Sabía usted que el emperador romano Constantino decretó que los que guardaban el Sabbat de Dios y no observaban el domingo como el día de reposo y adoración debían ser ejecutados? ¿Sabía usted que Constantino fue un adorador del dios sol hasta el día de su muerte? Está en los registros.
Si usted sigue el Cuarto Mandamiento de Dios, usted tiene vida. ¿Cuál mandamiento y de quién es el que usted está siguiendo si guarda el domingo? ¿Tendrá usted vida siguiendo la ley de un gobernador pagano que amenaza de muerte si usted no le obedece a él?
Escuche lo que los apóstoles declararon:
“Mas respondiendo Pedro y los apóstoles, dijeron: Debemos obedecer a Dios antes que a los hombres.” (Hechos 5:29 LBLA)
Algunos señalan que Pablo dice: “Uno juzga que un día es superior a otro, otro juzga iguales todos los días. Cada cual esté plenamente convencido según su propio sentir” (Romanos 14:5). Note, sin embargo, que no hay ninguna indicación de que Pablo estuviese hablando del Sabbat semanal. Por lo tanto, no se puede asumir que él estaba enseñando que guardar el día sábado fuera opcional. No encontraremos concesión para esa idea si creemos el testimonio completo de las Escrituras y de otras palabras y doctrinas de Pablo.
Sólo unos capítulos antes, Pablo dice que “la Ley es santa, y el mandamiento santo, justo y bueno” (Romanos 7:12). Él también dijo: “¿Entonces invalidamos la Ley por la fe? ¡En ninguna manera! Antes bien, confirmamos la Ley.” (Romanos 3:31).
Si alguien quiere pensar que un mandamiento fue cambiado, necesitará recordar las palabras del Señor al Cual presume adorar:
Mateo 5:17-19 RVG
(17) No penséis que he venido para abrogar la Ley o los Profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir.
(18) Porque de cierto os digo que hasta que pasen el Cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la Ley, hasta que todo sea cumplido.
(19) De manera que cualquiera que quebrantare uno de estos mandamientos muy pequeños, y así enseñare a los hombres, muy pequeño será llamado en el Reino de los Cielos; mas cualquiera que los hiciere y enseñare, éste será llamado grande en el Reino de los Cielos.
Ni una jota ni una tilde. Por lo tanto, el argumento de que se puede llamar de reposo a otro día, sea domingo o cualquier otro, es contrario al Señor y Su Ley.
Yo prefiero ser llamado grande en el Reino de los Cielos enseñando a guardar toda la Ley de Dios. Y debemos recordar las palabras de Santiago:
“Cualquiera que falle en un punto de la Ley, se ha hecho culpable de todos.” (Santiago 2:10 NBLH)
Guardar el domingo como una ley religiosa es maldad, un decreto de mortales que contradicen a Dios Mismo, y que presumen representarlo a Él. Guardar el domingo como asunto de inocente persuasión no es tan serio. Sin embargo, sea que quebrantemos la Ley de Dios deliberadamente o en ignorancia, traemos juicio sobre nosotros; sufrimos las consecuencias.
Yo he guardado el domingo y el verdadero Sabbat, el sábado. Así como el verdadero fruto es mejor que el artificial, así el verdadero Sabbat es mucho mejor que el del hombre.
Pero recordemos que guardar un día externo de ninguna manera es suficiente. Debemos esforzarnos por el Sabbat interno, la Llegada del Séptimo Día de la Vida, donde está el verdadero reposo. Usted tiene que saber que el mandamiento del Sabbat significa mucho más que un día físico; todo cuanto se guarde en un día físico no será suficiente si no se obtiene ese “mucho más.”
“Porque si Josué les hubiera dado el reposo, no hablaría después de otro día. Por tanto, queda un reposo para el pueblo de Dios. Porque el que ha entrado en Su reposo, también ha reposado de sus obras, como Dios de las Suyas. Procuremos, pues, entrar en aquel reposo, para que ninguno caiga en semejante ejemplo de desobediencia.” (Hebreos 4:8-11 RVG).
Cualquier buscador de la verdad objetivo fácilmente reconocerá que los argumentos a favor del domingo en vez del sábado no tienen apoyo en las Escrituras. Dios no ha cambiado la Ley; Él no ha cambiado Su naturaleza; y Él no ha cambiado de parecer acerca de santificar el Sabbat (séptimo día).
Lea nuestra sección The Sabbath.
Considere la alternativa: Si usted muere por desobedecer el mandato de Dios y muere por desobedecer el mandato del hombre, ¿cuál muerte escogería?
“Mas os digo, amigos Míos: No temáis a los que matan el cuerpo, y después nada más pueden hacer. Pero os enseñaré a Quién debéis temer: Temed a Aquél que después de haber quitado la vida, tiene poder de echar en el infierno; sí, os digo, a Éste temed.” (Lucas 12:4-5 RVR)
La decisión es suya.
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